RESEÑA HISTORICA

 

El término Rakú tiene un espectro de significado muy amplio, puede significar goce, felicidad, placer. Según Bernard Leach, su origen se remonta al sello de oro que ofreció Taiko en 1598 a Chojiro, hijo de Ameya, inmigrante coreano que se instaló en Kyoto en 1525. Sin embargo, la mayoría dé los autores mencionan el sello y el nombre de Rakú como un ofrecimiento de Hideyoshi a Jokei (el segundo maestro del Rakú), que utilizaron él y sus sucesores.


Chojiro parece ser el primer ceramista que utilizó esta técnica. El Rakú está desde sus orígenes íntimamente ligado a la ceremonia del té. Era costumbre medieval japonesa, para los grandes señores feudales, ofrecer la ceremonia del té. Cuando los habitantes de Sakai se negaron a contribuir en los gastos de la guerra de Nobunaga, éste pidió ayuda a los maestros de la ceremonia del té, llamados sadó: Imai Sókyü, Tsuda Sógyü y Sen No Rikyü. A la muerte de Nobunaga estos tres maestros tuvieron que tomar parte en la disputa del título de Mitsu-hide y Hideyoshi.

Hideyoshi resultó ser el vencedor de la disputa y mantuvo a los tres maestros de la ceremonia del té, de los cuales destaca Rikyü. A Rikyü se le atribuye la influencia del diseño del cuenco del Rakú, la mayoría de estos cuencos provenían de China y Corea. Rikyü seleccionó los colores rojo y negro para combinar con el té verde. La protección de Rikyü sobre Chojiro fue de importancia capital para el desarrollo histórico del Rakú. Rikyü apreciaba tanto a Chojiro que le dio el nombre de su padre: Tanaka.


El desarrollo del Rakú en Occidente a partir de Bernard Leach y Paul Soldner no refleja la realidad histórica del Rakú. El Rakú se cocía en hornos de construcción muy simple, en baja temperatura y, básicamente, en oxidación. Los colores eran dos: el rojo y el negro. El esmalte negro se hacía con una piedra molida del río Kamo y el Rakú rojo se producía con un esmalte transparente sobre un engobe de ocre amarillo, el ocre contiene elementos metálicos que se convierten en rojo cuando se oxidan. Posteriormente se añadió el color blanco a los dos anteriores.

La familia Rakú está compuesta por los siguientes ceramistas:

Chojiro (1516-1595 ó 92) | Jokei (1561-1633) | Donyu (1599-1656) | Ichinyu (1640-1696) | Sonyu (1664-1716) | Sanyu ( 1685-1739) | Chonyu (1714-1770) | Tokunyu ( 1745-1774) | Ryonyu (1756-1834) | Tannyu ( 1795-1854) | Keinyu (1817-1902) | Seinyu (1885-1944) | Kichizaemon (miembro contemporáneo de la familia)

Aparte de la familia Rakú es importante destacar a otras dos familias de ceramistas relacionadas con el Rakú: Honami Kóetsu (1558-1637) y Ogata Kenzan (1663-1743). Ogata Kenzan VI ofreció el título de Ogata Kenzan VII a Bernard Leach y a Kenkichi Tomimoto.

Warren Gilberson estudió Rakú en 1939 con Kanjiro Kawai, e introdujo el Rakú en Estados Unidos en 1941, con una exposición de doscientas cincuenta piezas en Chicago. Paul Soldner comenzó a hacer Rakú en reducción en Estados Unidos en 1960, en Los Angeles, California.

El Rakú, en la actualidad, es una técnica universalmente conocida. De los múltiples ceramistas que hacen Rakú destacan Robert Piepemburg, Frank Boyden, Hal Rigger, Wayne Higby, David Middel-brook, Joan Campbell, Richard Kirsch, Howard Yana Shapiro, John Chalke, David Tell, Betty Woodman, John Dunn, Francoise Kindler, Elisabeth Raeburn, entre otros. En España destacan Martí Royo, Cooperativa Coure, Xavier Touves, Nuria Pie, Javier Ramos, entre otros.